COMO ES LA CORDISCO

Una toscana encubierta

Quiza algunos hayan tenido la suerte de probarla bajo su otro nombre: en Italia esta tinta es reconocida como Montepulciano de Abruzzo, una D.O.C que identifica su procedencia y calidad. Aquí nomás ya es posible disfrutarla gracias a una de las bodegas más exploradoras de Mendoza.
La variedad Cordisco es típica de la región italiana de Abruzzo. Es uno de los nombres que puede tomar la uva Montepulciano d’ Abruzzo, una cepa muy antigua que parece haber llegado desde Grecia a Italia. Se hace desear, ya que tiene tiempos de maduración largos y pausados.

Regala colores intensos y vinos de gran personalidad que rápidamente se adaptó como variedad al  suelo cuyano.

Cuando tenemos una copa de vino de cordisco frente a nuestros ojos se ve de color rojo rubí brillante,con dejos de ciruela, guinda y frambuesa. Se presenta tensa en boca y mantiene su presencia por tiempo prolongado. De buena estructura, con taninos dulces y amables. 

La primera bodega que la popularizó en Argentina

No hace falta viajar hasta la Toscana para poder tomarse una buena copa de codisco, los hermanos Durigutti, de la bodega homónima,  ya la embotellaron para que desde su Finca Victoria, en Las Compuertas, Luján de Cuyo, Mendoza, llegue a nosotros y a un precio realmente tentador comparado con los que presentan hoy los vinos importados ( $ 18.000).

El Proyecto Las Compuertas Cordisco 2017 nació  con el propósito de rescatar lo mejor del carácter de esta uva en el microclima de esta valiosa parcela de suelo cuyano. Este vino es fermentado en huevos de cemento con levaduras nativas, ya que como otros elixires de la finca no suelen pasar por madera, sólo cemento y acero inoxidable lo que le valió a los hermanos la demonminación reciente de Mejores winemakers de la Argentina.

Como tinta,  ellos recomiendan mantenerla siempre a temperatura ambiente, entre 15 a 18 grados para apreciar todas sus cualidades organolépticas.

 

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